UNA FIESTA POR TODO LO ALTO...

No cabe hablar sino de éxito en todo lo relativo a la fiesta de fin de curso que se celebró el pasado viernes 13 de junio. Y prácticamente en todos los aspectos: actuaciones y actividades diseñadas, organización y montaje previo, decorado, afluencia de público (hubo un lleno absoluto, pero dar números de cuántas personas acudieron es siempre arriesgado; no obstante, hay quien estima en cerca de unas 2.000 personas las que por allí llegaron a pasar, quedándose muchas de ellas hasta pasada la medianoche), animación, ausencia de incidentes... La esperada victoria de la selección española de fútbol fue lo que no acompañó, pero eso estaba fuera del alcance de quienes allí nos reunimos... y tampoco logró restar alegría ni mérito al desarrollo de la velada. Fue, en realidad, una tarde/noche feliz, para disfrutar, sonreír y compartir vivencias y emociones con otros miembros de nuestra comunidad educativa.

Un ejemplo muy significativo de la complejidad de su organización, y del logro conseguido, es la importantísima y numerosa participación, de forma voluntaria, de más de un centenar de personas (sin contar alumnado, profesorado y personal de servicios), todas y cada una encargadas de algunas de las muchas tareas que tuvieron que acometerse. En este sentido, es digno de destacar el casi "parque temático" en torno al mundo medieval que se montó dentro de las instalaciones destinadas a infantil, con detalles cuidados al máximo: escenarios y decoración, torneos medievales (con "caballos" incluidos), danzas de época, tiros al blanco con catapultas y dragones, talleres de teatro y manualidades, etc., todo ambientado de la mejor y sorprendente forma, con vestimentas más que apropiadas, objetos hechos con primor (fue magnífico el trabajo realizado por padres/madres voluntarios que ejercieron de carpinteros para hacer las catapultas, o confeccionaron los caballos y otros materiales que pueden observarse en las fotografías de más abajo), etc. La labor desarrollada al frente de la barra y la cocina también es encomiable, al igual que la participación de muchas madres voluntarias para preparar y ensayar con el alumnado las diferentes actuaciones.

En suma, todo un éxito que estamos seguros que exigirá grandes esfuerzos en el futuro (que se vencerán, ¡cómo no!, con la originalidad de ideas y derroche de energía ahora mostrados y que vienen haciéndose presentes desde los primeros años de vida del centro, en un afán de superación cada vez mayor). ¡Gracias a todas y todos por formar parte de esta comunidad y participar en la misma! ¡Y en especial, ahora, a nuestra AMPA y a quienes con su trabajo y colaboración propiciaron que todos disfrutáramos de esta gran fiesta!