
La ONU proclamó en el año 2000 la conmemoración de este día para reivindicar el cumplimiento de los derechos humanos y las libertades fundamentales de todas estas personas y el objetivo todavía hoy, doce años después, sigue vigente. Migrar supone siempre un gran esfuerzo de adaptación, de entender nuevas realidades, de rupturas con raíces queridas, de hacer nuevas amistades… ¿Es tan difícil ponerse en lugar del otro, sobre todo cuando en esa situación podemos estar o llegar a estar todos? Ahora, por ejemplo, con la crisis, también crece el número de compatriotas nuestros que tienen necesidad de marcharse de España. También son inmigrantes allá donde van.
Ser migrante no es ninguna condición para ser objeto de discriminación, ni de marginación, ni menos aún de ilegalización. Migrar es un derecho básico, es un derecho humano.

No hay comentarios:
Publicar un comentario